¿Quieres ampliar tus reservas? DJs y agentes de éxito comparten sus consejos y experiencias, ayudándote a navegar por un mundo que funciona de forma muy diferente a la escena de los clubes.
¿Qué tienen en común los lanzamientos de productos de belleza, las fiestas de 70 cumpleaños, los bat mitzvahs y las copas al atardecer en un superyate? A menudo necesitan DJ. Y no cualquier DJ, sino DJs de formato abierto que, dependiendo del cliente y de las instrucciones, pueden crear un ambiente muy específico.
Un ambiente que no suele ser demasiado salvaje, pero tampoco demasiado serio. Ser un DJ de formato abierto -es decir, alguien que pincha una amplia gama de géneros, a menudo utilizando técnicas influidas por el hip-hop– requiere confianza, profundos conocimientos musicales y excelentes habilidades para mezclar. Debes ser lo bastante bueno como para mezclar varios géneros a la perfección, desde el swing de los 60 hasta el afrobeats. Tanto si tocas durante dos horas como si lo haces durante nueve, tendrás que olvidarte de tus propios gustos musicales y dar prioridad a los deseos de tu cliente. Así que si no te sientes cómodo mezclando ABBA con Missy Elliott, pinchar en formato abierto en un entorno corporativo o en una fiesta privada probablemente no sea una buena elección profesional. Pero para otros es una forma divertida, variada y potencialmente lucrativa de ganarse la vida.
Cada contratación y cada presupuesto son diferentes, y aquí no se aplican las reglas de la escena de club. Un DJ de discoteca contratado para abrir una noche de música tecno sabe que probablemente pinchará en una pista de baile vacía, creando una atmósfera acogedora a medida que el local se llena y permitiendo que el siguiente DJ tome el relevo sin problemas. Pero en los eventos corporativos, puedes pinchar en unos grandes almacenes muy iluminados a las 6 de la tarde o poner la banda sonora en el vestíbulo de un hotel de cinco estrellas durante la conferencia anual de una empresa tecnológica. El lugar y el público siempre son diferentes, por eso pinchar para empresas no es tan fácil como parece.
¿Qué hay que hacer para pinchar en eventos corporativos y hacer carrera? ¿Y cómo es este mundo por dentro? Preguntamos a agentes de talento y DJ de todo el mundo por sus consejos y opiniones sobre cómo abordarlo.
Tener un agente puede darte una sólida introducción en el mundo empresarial y ayudarte a conseguir tantas o tan pocas contrataciones como desees. Jaynee Wilkins es la fundadora de JW Agency, una agencia de DJ de formato abierto y empresa de gestión de artistas con sede en Londres que cuenta con más de 100 DJ en su cartera. La agencia suministra DJ a eventos corporativos en todo el Reino Unido, como la fiesta de Navidad del personal de Porsche, afterparties durante la Semana de la Moda de Londres, actuaciones en bares Be At One (donde los DJ de JW tienen residencias permanentes) y eventos corporativos de Ministry of Sound. La rama internacional de la agencia, JW Elite, proporciona DJs a lugares y espacios de primera categoría en todo el mundo, como yates de lujo, clubes de playa y complejos turísticos de 5 estrellas.
Jaynee busca el potencial de los DJ y, una vez contratados, les ayuda a convertirse en selectores cualificados y demandados a través de la JW DJ Academy, donde el equipo forma intensamente a los nuevos fichajes. «No buscamos la mezcla perfecta», explica, refiriéndose al nivel de las mezclas que la agencia recibe de los aspirantes. «Obviamente, si las conseguimos, es increíble. Pero cuando alguien se incorpora a la agencia, probablemente piensa que es bueno, sin embargo, no está al nivel que debería, y eso se debe a que nadie se ha tomado la molestia de decírselo porque probablemente acaba de aprender a tocar en casa. No han tenido a nadie que les enseñara, así que somos muy prácticos con nuestros DJ. Somos como una gran familia. Estamos muy pendientes de su desarrollo todo el tiempo».
La personalidad es otro factor decisivo en JW. «Buscamos gente buena que quiera formar parte de nuestro sueño», dice Jaynee. «Entendemos que están en un viaje para ser DJ de éxito, pero mientras están con nosotros están con un equipo, así que es muy importante que sean buenas personas, agradables y que encajen con todos. Además, representan a la agencia ante nuestros clientes. Aunque seas un DJ increíble, si eres arrogante ni te miramos. Así somos nosotros. Nos importa mucho la gente».
Laura Harvey, DJ de clubes y eventos corporativos, es la fundadora de la agencia SpinSisters, con sede en Londres, que ofrece DJ femeninas para eventos corporativos y bodas en todo el Reino Unido y el extranjero. Ha organizado fiestas para el personal de Meta, el 25 aniversario de Google y el lanzamiento de nuevos productos de Patrón Tequila.
Laura busca la experiencia de un DJ antes de añadirlo a su lista. «Porque sé lo duro que es este trabajo», dice. «Sí, es divertido, pero es muy duro. Tienes que ser capaz de pensar con los pies en la tierra, y tienes que ser capaz de pensar rápido. Lo que más busco es experiencia. Si alguien viene y me dice: «He sido DJ en dos bodas, ¿puedo unirme al equipo? Le digo: «Vuelve cuando hayas hecho 20″. Es nuestro nombre el que está en juego, y obviamente los clientes escriben críticas sobre nosotros, y hasta ahora, toco madera, todas son de cinco estrellas. Así que yo no contrataría a cualquiera».
Liam Pitcher es el fundador y DJ jefe de The DJ Company, una agencia sudafricana que ofrece una amplia gama de DJ (hay 25 nombres clave en la lista, pero la empresa tiene acceso a más de 100 DJ) que prestan servicio en Ciudad del Cabo, Pretoria, Johannesburgo y Durban. En la agenda de la empresa figuran contrataciones corporativas para marcas como Cadbury, el equipo de rugby The Stormers, el triatlón Woolworths y TotalEnergies.
«Lo primero que busco es alguien que no me haya copiado y pegado un correo electrónico para otra empresa», afirma Liam. «Sólo sé que si veo ‘Hola’ o ‘Estimado señor/señora’ o si el eslogan es ‘Nos gustaría unirnos a la agencia’, o incluso si hay un error ortográfico en el correo electrónico, o si parece que la persona que envía el correo no ha puesto ningún esfuerzo en ello o no se ha tomado el tiempo de investigar realmente sobre la empresa y poner algo personal en el alcance, literalmente lo cerraré y nunca le responderé».
La comunicación eficaz es otro signo que Liam busca. «Quiero ver que esa persona puede comunicarse de forma profesional, porque somos una marca profesional», afirma. «No somos una marca relajada. He tenido DJs que me han dicho cosas como: ‘Oye, tío, vamos a tomar una cerveza juntos alguna vez, y podemos hablar de mierda y charlar sobre posibles actuaciones como DJ’. Ahí ya has perdido, nunca trabajaré contigo… Así que si te pones en contacto con una empresa de DJs, hazlo de forma personal y profesional, demuéstrales que has investigado y que te importa lo que hacen».
JW Agency recibe más de 500 solicitudes al año, la mayoría a través de la bandeja de entrada del responsable de contratación. Los aspirantes deben enviar tres mezclas que se ajusten a las directrices de la solicitud, junto con un retrato reciente y enlaces a redes sociales. Si a los responsables les gusta lo que oyen, organizan entrevistas telefónicas y deciden si el DJ tiene la personalidad y la motivación adecuadas para trabajar con JW. Una vez superadas las entrevistas telefónicas, la agencia invita al candidato a una prueba con su responsable de formación y desarrollo, para que pueda ver al DJ en acción.
«Estamos allí para ver cómo son, su personalidad y cómo son, ese tipo de cosas», dice Jaynee. «Si superan la prueba, tienen que rellenar un montón de papeleo y asistir a una iniciación como DJ. Parte de la iniciación consiste en ir a nuestra Academia de DJ y recibir formación de uno de nuestros tutores en todos los géneros. Es un proceso bastante largo. Y cuando lo han superado, los llevamos a cenar».
En SpinSisters, la mayoría de los DJ se ponen en contacto directamente con Laura para unirse a la agencia. Laura organiza una reunión y evalúa la experiencia del DJ y si se adapta al estilo de eventos de la agencia. Si tiene éxito, Laura añade al DJ al canal de difusión de SpinSisters, donde informa a la lista de nuevas ofertas. A partir de ahí, es el DJ quien se presenta a los conciertos.
En The DJ Company, Liam comprueba las ganas de un aspirante pidiéndole que envíe un dossier de prensa electrónico, pero normalmente nunca recibe respuesta. Si el aspirante responde con prontitud, Liam concierta una reunión y, si todo va bien, le pone a prueba en «eventos de bajo presupuesto» para ver cómo se desenvuelve.
«Entonces analizaría cuáles son tus puntos fuertes, cuáles tus puntos débiles y en qué tenemos que trabajar», explica. «Pero no empezaría a orientarles demasiado hasta que hubieran hecho un evento para mí y me demostraran que pueden llegar a tiempo, ser profesionales y saber cómo conectar un altavoz y un mixer, ese tipo de cosas. Tienen que conocer realmente los entresijos del funcionamiento de un evento para que yo pueda enviarlos allí y confiar en que no tengo que tener a alguien allí que les haga de niñera sobre cómo conectar un altavoz. Tienen que saber todas estas cosas». Para Liam, también es crucial tratar con cuidado el equipo del DJ y recibir comentarios de cinco estrellas del cliente.
En cualquier sector que implique talento, suele haber un agente que lo representa. El agente se lleva una parte de los honorarios del artista o se la añade. Pero en el caso de los DJ de formato abierto, la parte del agente puede variar porque depende del cliente, de su presupuesto y de si la agencia tiene que alquilar equipos.
Jaynee pone un ejemplo. «Si se trata de un evento corporativo en el que tenemos que proporcionar equipo, normalmente la agencia cobrará por el equipo», dijo. «Y esos serán nuestros honorarios, y luego el DJ cobrará los suyos».
Los honorarios de la agencia también dependen del lugar de celebración. «Somos bastante generosos; probablemente nos quedemos con el 15%, ni siquiera eso», dice Jaynee. «Depende… Por ejemplo, nuestros DJ de tiempo completo ganan unos 4.000 euros al mes. Siempre van a ganar unos 4.000 euros al mes, aunque actúen en distintos locales, porque es una mezcla. No es que un mes reciban 500 libras y al siguiente 6.000… Con los eventos corporativos creo que puedes ganar más dinero, porque muchas marcas tienen presupuestos más elevados, pero depende».
La comisión en SpinSisters suele ser del 30%. «Pero a veces es menos», dice Laura. «Por ejemplo, si alguien se pusiera en contacto conmigo ahora diciendo: ‘Necesito un DJ esta noche’, y no estuvieran dispuestos a pagar lo que cobramos normalmente, pienso: ‘Bueno, no va a venir nada más esta noche, así que quizá vaya y haga este bolo barato’. Y entonces a veces la tarifa puede cambiar. Pero en general ronda el 30%».
«Nuestros honorarios por actuaciones de DJ para empresas empiezan en 1.000 libras y suben hasta alrededor de 5.000 libras, dependiendo de las horas de la actuación, la ubicación de la misma y el DJ que decidan contratar. La comisión de SpinSisters suele ser del 30%. Suelo hacer una reunión de Zoom con el cliente para conocer todos los requisitos y encontrar al DJ adecuado para sus necesidades, y negocio los honorarios adecuados para las chicas. Puedo dedicar mucho tiempo a los correos electrónicos y a las reuniones de Zoom, además de ayudar con la logística en los lugares de celebración. Y, por supuesto, tengo que pagar todos los gastos de mi empresa para mantenernos en funcionamiento, así que creo que un 30% de comisión es justo».
Liam calculó las tarifas de DJ equivalentes del rand sudafricano a la libra esterlina. «Lo que cobramos a las empresas puede oscilar entre 250 libras (315 dólares actuales) por un día completo con el mínimo montaje posible», explica. «Por ejemplo, dos altavoces de 10 pulgadas en postes con equipo de DJ y dos focos en la mesa: 250 libras, más los gastos de viaje de la tarifa AA. Pero un evento puede llegar a cualquier cantidad», continuó, mencionando una boda reciente contratada por unas 5.000 libras o 6.345 dólares. «Se trata de un evento de un solo día, e iré yo mismo con dos de mis mejores ayudantes, y eso para un montaje de sonido más elaborado: algunas estructuras de iluminación, máquinas de chispa fría y una bailarina de vestidos LED, así que depende de lo que haya en la lista de requisitos».
Esos requisitos varían, y eso afecta a los honorarios de la agencia. Liam hizo hincapié en cómo una firme «propuesta de valor» puede beneficiar económicamente a cualquier agencia. «La nuestra es que no sólo ponemos música, sino que creamos emociones», explicó. «Creamos experiencias inolvidables. Esa es nuestra propuesta de valor a través de los DJ sets, y un DJ set requiere equipos de sonido e iluminación… puedes cobrar más cuando puedes ofrecer más».
Kara Ford, alias DJ Kara, es una DJ de Los Ángeles que trabaja a tiempo completo sin agente. Tiene su propia agencia, DJ Kara LA, The Agency, que es una extensión de su negocio y una forma de ofrecer otros DJs cualificados a los clientes cuando ella no está disponible.
En los últimos 10 años, Kara se ha labrado una sólida reputación como DJ de formato abierto, actuando en eventos corporativos para marcas como HBO, Disney, Nike, Zillow, Microsoft y Amazon. Originaria de Indiana, Kara tiene experiencia en la producción de música «por diversión» y una licenciatura en negocios, por lo que en 2012 se trasladó a Los Ángeles para buscar un trabajo en la industria musical. En lugar de eso, se dedicó a ser DJ. Durante este periodo, respondió a un anuncio en Internet de una agencia de DJ de bodas que buscaba formar a nuevos DJ. Se presentó y consiguió un puesto en la agencia, donde la formaron durante seis meses, dos veces por semana.
«Se trataba de mucha formación como maestra de ceremonias y de conocer el desarrollo de una boda, y luego también hacían un poco de formación como DJ, simplemente te enseñaban a serlo», explica. «Tuve que hacer mucho de lo que aprendí por mi cuenta, porque en las bodas no se mezcla tanto, así que la mayor parte de las mezclas que hago ahora las aprendí por mi cuenta a través de YouTube».
Trabajar con la agencia sentó las bases para Kara, lo que le permitió salir de forma independiente y desarrollar su marca. En el sector de las bodas, «aprendió sobre las personas» y sus necesidades particulares, que es como adquirió la mayor parte de su experiencia. Entonces lanzó su página web, subió varias mezclas de varios géneros, implementó un SEO claro y empezó a recibir solicitudes de reserva, seguidas de reseñas de 5 estrellas.
«El sitio web es muy fácil de encontrar para quienes buscan DJ femeninas en Los Ángeles», explica. «Si alguien escribe eso, me encontrará. Además, a través de la página web puedo vender mis mezclas y cosas por el estilo. Así es fácil encontrarme. También tengo muchos contenidos que dicen: ‘Oye, esto es lo que he hecho'». Kara también tiene varios vídeos en su canal de YouTube, y recuerdos escritos de actuaciones en su blog.
Maxim Vantrois, alias AMAXXY, es un DJ de formato abierto afincado en Bélgica y la Costa Azul. Entre sus clientes actuales figuran Armand de Brignac (marca de champán de la que Jay-Z es copropietario), la Fórmula 1, el Festival de Cannes y muchos más. También ha pinchado para Naomi Campbell, Sylvester Stallone y Bella Hadid.
Empezó a pinchar a los 14 años, a los 16 pinchaba house en clubes belgas y dos años más tarde se trasladó a Francia, donde estudió producción musical y trabajó en un par de empresas. «El Festival de Cannes me descubrió y les gustó mucho mi estilo musical», explica. «Así que hice mi primer gran evento corporativo en el festival de cine, y lo disfruté muchísimo, porque en los eventos corporativos hay mucho presupuesto, así que invierten mucho tiempo, dinero y detalles, y eso me hace sentir más valorado por lo que hago. Trabajamos juntos en los proyectos, y eso es lo que más me gusta del DJ corporativo».
Aparte de algunas contrataciones a través de agencias a lo largo del año, Maxim se «autogestiona» y se ocupa de sus propias peticiones y agenda. Después de su debut en Cannes, Maxim construyó su repertorio estableciendo contactos y acudiendo a otros eventos de alto nivel; era nuevo en el sector y tuvo que empezar de scratch. «Hablaba con la gente, no sólo para conseguir actuaciones, sino también para conocer e interactuar con gente del sector», explica. «Aunque no me contrataran, era sólo para entender cómo funciona el sector de los eventos corporativos y de alto nivel. Y luego empecé a tocar para otros festivales corporativos, y entonces empezó a rodar».
En algunos casos, los detalles son mínimos, pero en otros van mucho más allá. «Armand de Brignac, por ejemplo, tiene unas preferencias musicales muy estrictas, así que cada vez que toco con ellos, hay varias videollamadas para hablar de las listas de reproducción, dependiendo de la importancia del evento», explica Maxim. «Si se trata de un cliente nuevo, me llaman para pedirme un presupuesto. Si el presupuesto se ajusta a sus necesidades, planifico una videollamada para conocer sus orientaciones y preferencias musicales.
«Entonces preparo algo que se ajuste a sus preferencias y programo otra videollamada», prosigue. «Vemos si coincide y si estoy en la misma línea que ellos quieren. Pero eso no significa que vaya a pinchar sólo esas canciones, es sólo para dar una orientación de lo que creo que encajará con su marca o con las preferencias que me dieron de antemano.»
La colección de Maxim incluye disco-funk, clásicos, R&B, hip-hop, house y cualquier cosa que pueda funcionar como «música de fondo» (no siempre son melodías de fiesta), así como música árabe, libanesa e india para bodas en destino.
Maxim dice que intenta aportar su propio estilo y enfoque a las mezclas, sin dejar de contentar a los invitados. «Si utilizo temas menos comerciales y más underground, intento combinarlos con una voz para que sigan siendo accesibles a los amantes de la música más comercial, pero sin dejar de incluir cosas nuevas en la mezcla… No pincho sólo listas de éxitos», dice, señalando que de otro modo sería igual que otros DJ. «Así que intento hacer ediciones adecuadas que tengan un aspecto menos comercial, por ejemplo, una canción house sobre la vocal de un clásico».
Las selecciones de DJ Kara varían según la marca y el grupo demográfico del público. «En general, intento que sea fresco y no cursi. Eso es lo mío: no quiero ser nunca la DJ cursi. Así que hay música nueva, muchos remixes, throwbacks y cosas así». Aunque a Kara le encantan los throwbacks de los 90 y los 00, las remezclas de clásicos, un poco de house, funk y «melodías y cuernos y simplemente vibración», siempre está leyendo la sala. «Si se trata de un evento de influencers y de gente joven, puede que no tenga muchos ‘throwbacks’, puede que haga más remezclas y más de lo nuevo que está saliendo», explica. «Pero cuando se trata de marcas corporativas como Zillow, hago muchos buenos ‘throwbacks’ y también muchas remezclas. Pero son los clásicos los que se mezclan, y a la gente le gusta mucho escucharlos porque son reconocibles, y dentro de eso, siguen siendo nuevos.»
La profesionalidad es «enorme», según Kara. «Tienes un negocio, vas a aparecer, vas a estar ahí», dijo. «Además, tener contenido: lo haces, te encanta, pones mezclas. Ten un montón de cosas por ahí, para que los clientes puedan verlas, y para que sepan que eres profesional. Ya pueden ver lo que vas a pinchar, y cómo vas a mezclar y cómo vas a ser».
Maxim afirma que «la profesionalidad, la puntualidad, la buena presencia y el comportamiento profesional» son atributos que un cliente corporativo busca en un DJ. «También buscan experiencia, y eso es importante mostrarlo en tu página web. Además, las habilidades comunicativas son cruciales, porque muchos DJ tienden a tener un lenguaje de ‘chicos guays’, y eso no va a funcionar en un sector corporativo».
Adaptarse a situaciones inesperadas es otro atributo. «A los clientes corporativos les encanta hacer cambios de última hora», dice Maxim. «Incluso hasta una hora antes, por ejemplo si va a haber un discurso o va a venir un invitado, y dos minutos después: ‘Oh, ya está aquí. Pon esto’. Hay que adaptarse con facilidad».
Los honorarios de los DJ corporativos tienden a ser altos porque cuanto mayor es la marca, mayor es el presupuesto, así que ese fue un punto a favor de la mayoría de los propietarios de agencias y DJ con los que hablamos. Laura, por ejemplo, ganó más con su primer contrato corporativo que con tres años de DJ en clubes.
Sin embargo, algunas actuaciones corporativas también pueden ser «tediosas». «A veces vas a un concierto en el centro de Londres y no hay sitio para aparcar, así que aparcas fuera y la gente de los muelles de carga es muy poco servicial», explica Laura, que menciona un hotel de lujo en el que apenas tuvo tiempo de descargar, aparcar en otro sitio y montar su equipo. «Pero pagan muy bien. Es un trabajo divertido. Obviamente, si te gusta la música, como a todos, nos encanta nuestro trabajo. Pero no todos los conciertos son de diez sobre diez. Algunos conciertos son muy divertidos y dices: «No puedo creer que me paguen por esto». Es tan bueno. Y en otros, como en cualquier otro trabajo, piensas: ‘Seré muy feliz cuando esto acabe'».
Para Maxim, una ventaja es que muchas marcas sólo organizan un evento corporativo al año. «Así que la gente siempre está muy ilusionada con esa única fiesta, y aprecian más el evento que ir a discotecas, por ejemplo, porque puedes ir a una discoteca todas las noches. Pero si tengo que poner una desventaja, sería que a veces me veo limitado a la hora de ser creativo».
Maxim recomendó que su presencia en Internet esté «a punto» porque es una forma de establecer contactos y de destacar ante clientes corporativos, que pueden ser inaccesibles en el día a día. «Al principio, me centraba mucho en mis habilidades técnicas y en la selección musical, y sigo haciéndolo», dijo. «Pero ahora creo que el 50% de mi tiempo lo dedico a hacer contactos, videollamadas y estar en línea. Tengo un buen SEO con mi página web, así que si escribes ‘DJ en Cannes’ o ‘DJ en Mónaco’, seré el primero que aparezca. Entonces el cliente abrirá mi página y verá vídeos perfectos, buenas mezclas, buenos textos y profesionalidad, y eso le convencerá para seguir leyendo… Es la única forma de que se pongan en contacto. Nadie se va a cruzar con el responsable de eventos de Louis Vuitton en un Starbucks de Bruselas».
Kara afirmó la importancia de tener un sitio web sólido y un SEO de primer nivel. «Para que vean que eres profesional, que harás el trabajo y que eres legítimo», dijo. «El sitio web es la prueba de ello, y luego tener las mezclas para respaldarlo como, ‘Wow, esto es lo que realmente pueden hacer’. Es muy fácil de vender, y eso les convencerá de que te quieren específicamente para su evento. Y luego, por supuesto, Instagram y las redes sociales son geniales, pero yo diría que la página web es lo más importante».
Laura aconseja potenciar Mixcloud y Soundcloud. «…porque eso es la prueba, y a mí lo que me importa es la prueba y la evidencia», dijo. «Consigue los vídeos de la gente volviéndose loca con tus sets y ponlos en tu Instagram porque así tienes algo que compartir con alguien».
Liam compartió consejos sobre cómo comprobar la legitimidad de una agencia. «¿Están actualizando su sitio web con regularidad, o su sitio web simplemente parece chocante, para ser sincero», dijo. «¿Las cosas no se cargan correctamente? ¿Utilizan animaciones anticuadas? Yo diría que más importante que el sitio web es el perfil de Google My Business: ¿tiene buenas críticas? ¿Lo han revisado recientemente? ¿Están subiendo contenido a Google My Business con regularidad o no? ¿Sube contenido a las redes sociales? ¿Son activos en las redes sociales? Cuando les llamas por teléfono y hablas con ellos, ¿son profesionales? ¿Están abiertos a colaborar? ¿O parecen personas amargadas que en realidad son un poco cerradas y engreídas?». Otra cuestión que hay que plantearse es si el agente trabaja a tiempo completo, para asegurarse de que tiene «mucho trabajo» para usted.
Jaynee dice que hay que estar preparado para «trabajar duro» y «ser resistente». «Siempre enseño a los DJ: ‘No os lo toméis como algo personal’. Nuestros locales también pueden tener sus DJ favoritos, y no es porque sean mejores DJ, sino porque al local le gusta su estilo, o porque hay una conexión personal. Es como cuando haces música: no le va a gustar a todo el mundo. Creo que hay que ser muy resistente en esta industria».
Texto: Niamh O’Connor
